"Su hija me trae problemas. No, su conducta es impecable. Si,tiene amigos. No, su promedio es alto. Igual, es rara, haga algo "-Mi maestra de Primer grado.

Cuando era chica hacia de todo para no ver esa cara, essssa cara de asco,de desagrado cuando decís o hacés algo diferente, algo que no hace nadie más en esa situación. Esa cara de ¿Por qué sos tan rara? era horrible.

Somos seres sociales. Lo que el otro hace dice piensa nos afecta, siempre. No seríamos personas si no nos importara. Al principio de nuestras vidas todo lo hacemos copiando, miramos a mamá para ver que hace y queremos el juguete que acaba de agarrar otro nene y antes no queríamos, pero ahora sí porque otro lo quiere.

Lo que vemos en otro lo queremos para nosotros. Eso es lo que está bien al principio de nuestras vidas. Por eso, cada vez que una persona le hace esa cara a un nene, le está calando un huequito adentro, lo está ayudando a crear un vacío que intentará llenar haciendo muchas cosas de las que luego se va a arrepentir el resto de su vida, perdiendo el respeto por sí mismo.

Pero cuando crecés, si lográs crecer lo suficiente de alma, llega un día, después de años y dolores, después de incontables noches de insomnio y terapia y odio y amor y encontrarte a vos mismo y volverte a perder y volverte a encontrar y probar peinados casas parejas amigos deportes bailar electrónica y bailar cumbia ser virgen ser puta ser virgen de nuevo creerte lo más y creerte lo menos darte cuenta qué cosas pensás del mundo que te hacen infeliz y aprender que la realidad es una construcción social y que no soy alta porque alta no existe soy alta porque todos nos pusimos de acuerdo en considerarme alta. Después de vomitar en los baños del colegio cuando hablaban de mi y de llorar rezando no quiero que me gusten las mujeres por favor por favor y si hacés que viva no pienso más en mujeres leer Nietszche en la madrugada de un sábado y salir todos los fines de semana y drogarte con tus amigos y levantarte desconocidos y después de que te enseñen la gente de tu edad los profesores los libros las películas y aprender y aprender y aprender después de que tus amigos cuenten cuanta gente te gustó/boludeaste/llegaste por lo menos a chaparte y que te avergüenze el número porque es clarísimo que tenés problemas para no salir corriendo (30 chicos 7 chicas) saber que se siente que te rompan el corazón, enamorarte de alguien enfermo que te humille, que algunas personas que querés se mueran y otras traten de suicidarse, esperar meses en pasillos de hospital, que un tipo te golpee durante años hasta desmayarte después de saber lo que se siente estar parada un martes a la tarde en el andén del B pensando en tirarte cuando llegue el subte odiando con toda tu alma cada vez que te dijeron que sos inteligente y llamaron inteligencia a una mente en embullición constante que para vos es un defecto y una maldición después del rivotril y mantener un promedio de 8.80 y una masa corporal de 18 toda la vida dedicándole desde los 15 años, 5 hs al sueño y 3 hs a entrenar y terminar a los 18 necesitando tres cuartos de una botella de tequila por semana después del shock de que se muriera antes de que pudieras decirle cuanto lo querías y de no poder llorar su muerte hasta que todo lo que te guardaste durante años te carcome y tocás fondo y terminas un viernes a las 5 am completamente en pedo diciéndole a tu mamá me quiero morir y ya no sé que hacer para no querer morirme y creí que podía sola y nunca dije nada porque todos estaban mal y los quería ayudar y vos estabas enferma y el cáncer puede empeorar por el estado de ánimo y mirá si te hacia empeorar y te morías igual que Víctor no quiero que nadie más se muera por favor pero me tengo miedo porque nadie se va a dar cuenta sonrío todo el tiempo pero me quiero morir y necesito ayuda, ayudame no quiero que nadie más se muera sólo quiero que nadie más se muera.

Después de todo eso, si de verdad querías ser feliz, si te aferraste a tus ganas de vivir y estás dispuesto a mutar y a tratar y a hacer lo necesario, hacer lo que sea que tenés que hacer para ser feliz llega un día, por fin, en que te das cuenta: esa cara no es de asco, es de miedo, y es de enojo porque ellos, al compararse con vos, pueden salir perdiendo. La pregunta ¿por qué sos rara? no es ¿por qué sos peor que nosotros?, sino ¿por qué sos capaz de pensar cosas de las nosotros no somos capaces?