mundos imaginarios

Siempre fui una nena con mucha imaginación. pero a veces quisiera ser ignorante. Y traté bastante tiempo de ser una hueca, lo admito. Pero no puedo. Estoy condenada a ser una mina que piensa. Cuando me dicen "sos madura" y contesto "sí, lo sé" no es de creída, nada más lejos. Porque para mí ser madura no es algo bueno. ¿Que tiene de lindo ser consciente antes de tiempo?¿Para qué? Además de que te vas a sentir solo porque no te entendés ni vos. However, la imaginación está muy buena en el ámbito de lo artístico, y por eso me siento tan bien sobre un escenario, entrenando, dibujando, escribiendo, creando de cualquier forma. Claro que en la vida diaria, es malo imaginar. Porque la línea entre los sueños y las ilusiones es casi invisible para mí. So soy capaz de armar bidones de una gota de agua. Dame una hora y con una sola línea armo dos trilogías y un final alternativo.
Qué tantas palabras, invento películas cada día, me pierdo en mis mundos y si, claro está, es muy fácil ilusionarme y por lo tanto, muy sencillo desilusionarme. Intento controlarme, intento improvisar y no pensar, para no sufrir. Pero el sufrimiento no es porque me crea mis guiones, no soy de esas. Sino porque soy como Cielo Latini , mi imaginación siempre es más grandiosa y más potente y mucho más placentera que la realidad.
Soy positiva, y por eso siempre pienso en la peor opción. De esa forma, la vida va a sorprenderte para bien y no para mal. Sí, quizás son sistemas idiotas y posiblemente soy una little neurótica , pero cada uno tiene sus murallas de defensa. Un psicólogo una vez me dijo que soy una persona volcán, es decir, trago y acumulo, hasta que no aguanto más y hago erupción. Mi capacidad de aguante y de resistencia al dolor es bastante grande. Nunca jamás estoy histérica ni tengo un mal día, es raro que no piense en los demás antes de hacer algo y en general porto una sonrisa 24/7. Pero cuando exploto, mierrrda que exploto. Aunque soy hipersensible, aprovecho a llorar en toda buena comedia romántica que encuentre, porque no me gusta que me vean llorar, aparte de que lo que me pasa a mí no me hace llorar. No puedo. La angustia es demasiado fuerte como para llorar. Nisiquiera me deja respirar. También por este precioso sistema es que cuando me caigo un día es terrible, y yo sé que el mundo no se termina ni deja de girar pero pareciera por momentos. En esos días, confío en que mañana todo se va a arreglar, aunque no se cómo. Unos días después todo está mejor.
Y lo mejor es que ya se arregló. Pero , ¿para que tratar de sostener muros esta vez, de no tejer ilusiones? Oh, wow, esperen, ya es tarde! Hola a otro pendejo que me va a hacer sufrir. Bienvenido seas a mi muralla, sweetheart! w e`re all mad here.